Alternancia
– Revista de Educación e Investigación
www.revistaalternancia.org
ISSN:
2710 - 0936 | ISSN-L: 2710 – 0936
Vol. 4.
No. 7 | Enero - junio 2022 | Páginas 73 – 86
Educación
Remota de Emergencia: Aplicaciones y plataformas educativas utilizadas durante
la pandemia
Emergency Remote Education:
Apps and educational platforms
used during the pandemic
Karla
Karina Ruiz Mendoza
ruiz.karla32@uabc.edu.mx
https://orcid.org/0000-0001-8978-8364
Karla
Castillo Villapudua
castillo.karla@uabc.edu.mx
https://orcid.org/0000-0002-3693-6420
María
Miramontes Arteaga
m_miramontes@uabc.edu.mx
https://orcid.org/0000-0002-0550-0309
Azucena
Yoselin González García
gonzalez.azucena@uabc.edu.mx
https://orcid.org/0000-0002-1217-7247
Universidad
Autónoma de Baja California, Baja California, México
Recibido:
abril de 2022 / Arbitrado: mayo 2022 /
Aceptado: junio 2022 / Publicado en julio 2022
RESUMEN
El objetivo
de este trabajo consistió
en analizar el uso y
manejo de aplicaciones
y plataformas educativas por parte de los docentes a través
de una encuesta realizada en línea para comprender los alcances
y limitaciones dentro
de la llamada
Educación Remota de Emergencia
debido a la
pandemia por Covid-19. La investigación es un estudio observacional
descriptivo de corte transversal. La encuesta fue aplicada en enero del año
2021, a través de formularios de Google, la cual recabó información sobre
91 docentes del
estado de Baja
California, con edades
comprendidas de los 22
a los 58 años de edad. Los resultados apuntan a que los docentes se encuentran
utilizando las herramientas con las que han tenido acercamiento, y por lo tanto, son más sencillas de manipular e
implementar, lo cual corresponde a la llamada Educación Remota de Emergencia,
donde hacen uso de herramientas a medida de sus posibilidades.
Palabras
clave:
Educación Remota de Emergencia; LMS; Google for Education; aplicaciones; educación virtual; educación a
distancia
ABSTRACT
The objective
of this work
was to analyze
the use and management of educational applications and platforms by teachers through
an online survey to understand the
scope and limitations within the so-called
Emergency Remote Education due to the
Covid pandemic- 19. The research is
a descriptive, cross-sectional observational
study. The survey was applied
in January 2021, through
Google forms, which collected information on 91 teachers in the state of
Baja California, with ages ranging from 22 to 58 years old.
The results indicate that teachers
are using the tools with which
they have been approached.
Keywords: Remote Emergency Education; LMS; Google for Education; applications; virtual education; distance education
INTRODUCCIÓN
Este estudio
parte de lo
hoy en día ubicamos como pandemia
por Covid-19. El 11
de marzo del
año 2020, la
Organización Mundial de
la Salud (OMS)
declaró la pandemia por SARS-CoV2 (OMS, 2020). A abril
del año 2021 se puede declarar más de 209 mil fallecimientos y más de 2.8
millones de casos por
la Covid-19 en
México, reportados por
el Centro de
Ciencia e Ingeniería
de Sistemas (CSSE)
de la Universidad
Johns Hopkins. Hoy en día sabemos y entendemos la
gravedad que esto ha conllevado. Incluso, como docentes e investigadores, nos
hemos percatado y vivido de primera mano el impacto que ha provocado en el
aula; incluso con nuestros compañeros.
En este
sentido, en el
ámbito educativo podemos
reconocer las fisuras
que se han acrecentado
debido a esta
pandemia mundial. Estas grietas
las podemos encontrar, por ejemplo, en el
uso de dispositivos, aplicaciones, plataformas
entre docentes y
alumnos, es decir
en sus aplicaciones
dentro de la
modalidad a distancia
(concepto que se
aclarará en el
marco teórico), pero
¿es así?, ¿realmente
comprendemos el impacto
de la tecnología y los medios digitales en los docentes? Además, ¿qué
aplicaciones y cómo las usan?, ¿es un uso adecuado?
Claro que el uso
de la tecnología
y las aplicaciones no es el único problema. Sabemos
de las brechas
económicas que existen,
por lo cual
podemos encontrar alumnos
que no tienen
acceso a la
Internet y alumnos
sin problemas de este tipo; y
esto también se repite en el caso
de algunos docentes.
No obstante son necesarios más datos para poder afirmar
lo antes
mencionado. Por ende,
el objetivo de
este trabajo fue
analizar el uso
y manejo de
aplicaciones y plataformas
educativas por parte
de los docentes
a través de
una encuesta realizada en línea
para comprender los alcances y
limitaciones dentro de
la llamada Educación
Remota de Emergencia.
Esta encuesta fue
aplicada en enero
del año 2021, con el fin de alcanzar conclusiones que
permitieran vislumbrar el panorama actual, a diez meses de la declaración de la
OMS.
La hipótesis
que podemos plantear
es que los
docentes sí utilizan
plataformas, o aplicaciones, que
apoyan el desarrollo
de sus clases,
pero estos docentes
son, en su
mayoría, de escuelas
privadas, asimismo, cuando
utilizan estas plataformas
no logran reconocer
exactamente que están
utilizando lo que no potencializa
el concepto de diseño instruccional digital. Finalmente, los docentes están tratando de
mantener la estructura
de las clases presenciales sin
tomar en cuenta el cambio a las actividades digitales, por lo cual las aplicaciones
para los profesores
pueden ser más estorbosas que
aplicables.
Marco teórico
El
8 de abril del 2020, a, aproximadamente, un
mes del anuncio
de la OMS
sobre la pandemia, la Secretaría de Educación Pública
(SEP) emitió el
boletín “10 sugerencias
para la educación
durante la emergencia
por COVID-19”, el cual propuso
proteger y tomar en cuenta a los estudiantes con menos recursos, esto con el
fin de proteger las grandes brechas digitales.
Algunas de las
recomendaciones fueron: “Atender
con prioridad a
quienes no tienen acceso a tecnologías de la información
y la
comunicación (TIC) o
a servicios de
telecomunicación o radiodifusión en
el hogar.”, “Asegurar el
aprendizaje necesario para enfrentar la emergencia en un marco de
colaboración intersectorial.”, y, “Propiciar que las madres y los padres de
familia enseñen de acuerdo con sus posibilidades: los hogares no son escuelas,
las madres y los padres de familia no
son docentes.”. Estas estrategias parecían
tener la intención
de marcar pautas
o líneas de
acción, los padres
no son docentes,
los docentes no son padres, y que
todos pudieran seguir en medida de sus posibilidades, el ciclo escolar.
Asimismo,
en diciembre de ese mismo año, la SEP
emitió el boletín
“Boletín SEP no. 332 Expone SEP
estrategia educativa de Aprende en Casa
a representantes de
Japón”, el cual
nos ayuda a visualizar la estrategia general. En este boletín se informa
cómo la SEP realizó un convenio con
Google For Education (Google
para la educación)
con el fin
de estrechar las brechas,
“se logró la
gratuidad de estas
aplicaciones, así como
la capacitación del
personal docente a través de 20 seminarios en línea.” (2020), informan. También comunican sobre la estrategia Aprende en Casa, dividida
en tres partes:
• Aprende
en Casa I: aquí, los Libros
de Texto Gratuitos
se alinearon con
los contenidos que
transmitieron por el
canal 11.2 de
la televisión pública,
a partir de
abril del 2020.
• Aprende
en Casa II:
esta segunda estrategia comenzó en el nuevo ciclo
escolar. Con el fin de mejorar los instrumentos a usar, integraron una
plataforma educativa con
el mismo nombre, así como un canal
de YouTube; abarcando educación básica,
bachillerato y telebachillerato. En la
plataforma educativa cualquier alumno puede ingresar a tomar sus
clases, el portal
es:
https://laescuelaencasa.mx/escuela-contigo/ y el canal
de YouTube es
el siguiente: https://www.youtube.com/c/aprendeencasa
• Aprende en
Casa III: esta
es una de
las propuestas más
complejas, puesto que
se enfoca en
una cooperación con
Altán Redes, “para
tener una Tarifa
Cero; es decir,
por primera vez una compañía de
telefonía móvil en el país da acceso gratuito a ese servicio (...).” (SEP, 2020). Esta incorporación debería
estar durante la
segunda parte del
Ciclo Escolar 2020-2021.
Esta última
estrategia debe de
seguirse y procurarse,
ya que
Altán Redes es
una compañía de
Redes Compartidas de
4.5 G, la
cual puede instalarse
en casa o
bien en dispositivos
móviles. Altán Redes
obtuvo un acuerdo
con el Organismo
Promotor de Inversiones en
Telecomunicaciones (PROMTEL) de
parte del gobierno
mexicano desde el
año 2018, por
lo que la
pandemia podría ser
positiva en cuestiones
de llevar la
Internet a más
partes del país
(PROMTEL, 2020). No obstante, aunque
no ahondaremos en los avances de este proyecto, se hace una
extensa invitación para
hacer un análisis
sobre las ventajas, desventajas, características y más
de esta nueva
red y el
impacto en la
educación pública.
Por otro
lado, podemos agregar
que la SEP
ha estado planteando
un modelo de
educación a distancia,
mas no de
educación virtual, como
lo indicó en
agosto del 2020,
Esteban Moctezuma (en
ese momento el
titular de la SEP), “Boletín No. 210 Trabaja SEP por una
educación a distancia
con la mayor
calidad y cobertura:
Esteban Moctezuma Barragán” (SEP, 2020).
Por lo
anterior, primero hay que definir qué es la
educación a distancia,
según Fernando Juca
(2016), “la educación
a distancia es
un método o
sistema educativo de
formación independiente, no
presencial, mediada por
diversas tecnologías.” (p.107), por
otra parte, según
Constanza, González, y
Padilla (2010), la
educación a distancia
planea una metodología
con estrategias de
enseñanza-aprendizaje que superen
las limitaciones del
espacio y tiempo.
Con base en
lo anterior, se
puede decir que
la educación a
distancia es una serie de estrategias que ayudan a cumplir
objetivos educativos a
pesar del tiempo
y el espacio.
No obstante,
la educación a
distancia no parece centrarse en el tema de la virtualidad
y todo
lo que conlleva,
pues como podemos
entender, los objetivos
y competencias de
la SEP, así como de diversas
universidades, no se elaboraron a partir del concepto de virtualidad. En cuanto
a la definición de educación virtual, Rafael Nieto (2012) nos dice que la
educación virtual refiere a la liberación
del concepto abierto y a distancia,
es decir, normalmente
cuando se habla de educación virtual se tiene que ahondar
sobre las expectativas
hacia el futuro,
en donde se
ubica la posibilidad
de una educación
totalmente en la
nube, por lo que
también señala “(...) la “educación virtual” –abierta y
a distancia– se
perfila como una panacea
ante estos retos,
al ofrecer ampliar
las oportunidades de
acceso a los
grupos sociales marginados o
desatendidos.” (p.139).
Sin
embargo, no son los únicos términos en discusión. Conforme ha
avanzado el tiempo,
diversos investigadores (Portillo,
Castellanos, Reynoso y Gavottto 2020) han expuesto estos otros términos:
educación online, educación
remota, y, la
que aparentemente se
ha quedado, educación
remota de emergencia.
Éste último concepto
fue expuesto, por
primera vez, en el texto “Enseñanza Remota de Emergencia. Textos de
discusión.” en abril
de 2020, a cargo de The Learning Factor. Lo cual
refiere a que en una situación de emergencia, las herramientas están
por definirse, no hay
un plan,
y por ende,
se trabaja con
lo que se
tiene a la mano. Por ello, se entiende que ante esta situación algunos
profesores optaran por ir
a las casas
de sus estudiantes,
o bien, que
los colegios solicitaran a los padres de familia dejar los cuadernillos
de ejercicios cada cierto tiempo en las instalaciones correspondientes.
En cuanto
a las opciones
o herramientas por
las que podrían
optar los docentes
son las siguientes:
plataformas educativas, aplicaciones educativas, páginas web
(diversas: vídeos, audios,
contenidos), o bien
libros enriquecidos. Los libros
enriquecidos se han estado
comercializando cada vez más, estos
pueden leerse en
algunos dispositivos específicos o bien desde cualquier
dispositivo o computadora, el formato en el que se presentan es plano del tipo
TXT o PDF, o complejo como EPUB, MOBI, HTML, AZW (Márquez y Quezada,
2016). Algunos de
estos libros enriquecidos,
pueden tener ligas a páginas web específicas, videos, audios,
animaciones 3D, entre
otros usos. En el
caso de México,
sí se pueden
encontrar editoriales privadas que hacen uso de todas
estas características, es
el caso de Amco, SM, Santillana, entre otros.
Asimismo, a
las plataformas educativas
podemos llamarlas Learning Management
Systems (LMS) o bien, Sistemas de Gestión de
Aprendizaje (en español).
Estas plataformas están diseñadas para la formación totalmente virtual, ya
que devienen de
todo un sistema
diseñado a partir
de módulos de
aprendizaje y caminos de
aprendizaje, en este sentido, se enfocan
a gestionar contenidos,
integrando herramientas de comunicación
y colaboración, con foros, salas de chat, mensajería, así como
herramientas de seguimiento
y evaluación, donde
también se incluye
la creación de
grupos para el trabajo colaborativo
(Barjas y Ramírez, 2017).
Una de
estas plataformas es
Google Classroom, que
si bien no
incluye todo tipo
de herramientas como
las mencionadas anteriormente, Google,
de forma inteligente,
ha dividido todas
las funciones en
diversas aplicaciones, las
cuales en conjunto
se les denomina como GSuite,
el cual integra: foros, chat,
formularios, hojas de
cálculo, creación de documentos y presentaciones, entre otros. No obstante, a
pesar de que
existen diversas herramientas
y plataformas LMS
(Chamilo,
Neo, Blackboard, Moodle,
entre otros), la
mayoría de los
docentes, desde hace
ya varios años,
ha optado sólo
por conocer y
capacitarse en Google
Classroom,
de lo cual,
aún desconocemos las
desventajas que esto
pueda conllevar, sobre todo si se habla de la seguridad y privacidad de
los datos (Tarango, Machin y Romo, 2019).
Entonces, como
se ha revisado anteriormente, la
Educación Remota de
Emergencia podría equivaler a establecer las reglas de la clase a partir
de las necesidades específicas de los
grupos. Lo que
trae a colación las
grandes brechas educativas que
ya existían, tornándose
más evidentes. Por ejemplo, Mendoza (2020),
explica no sólo
la desvinculación con
los conceptos de
educación virtual, a
distancia, digital o
bien con el manejo de las
aplicaciones o el LMS, sino cómo las estrategias
no logran asemejarse
con la educación a distancia:
y
Aplicar estrategias
de educación a
distancia no es
equivalente a la
educación formal a distancia. Si bien tienen aspectos en común, la
lógica de planeación, uso
de recursos e
interacción de los
agentes involucrados son elementos robustos que deben construirse con
dedicación y diligencia, de acuerdo con las características de cada una. (p.2)
Por otra
parte, la revista
RIED habla del
aprendizaje integrado, es
decir, de las
estrategias que ayuden a integrar, armonizar, enriquecer, conjugar,
los medios y
recursos que parten
de las tecnologías
y los medios
de comunicación, lo
cual se conjuga
con el
concepto de flexibilidad, tal
como lo indica Lorenzo
García (2021). La flexibilidad que García
integra a este
concepto parte de
las siguientes premisas:
el impulso a
la digitalización, flexibilidad
en el orden
de las comunidades, adaptarse
a las circunstancias, comprender los confinamientos intermitentes,
flexibilidad en el uso de recursos, entre otros.
Asimismo,
el autor antes mencionado habla de cubrir necesidades emocionales, tomar en
cuenta a quienes se les imposibilita aprender por la
vía virtual, prevenir
la adicción a
las tecnologías o su mal uso,
comprender y tomar en cuenta los
estados de cansancio
y ánimo, así
como estar atentos
a los problemas
de privacidad, confidencialidad y
protección de datos personales.
Esto último lo plantea como un gran
reto sobre los
usos y la
información que se debe tener al
respecto para que todos los
usuarios, tanto alumnos
como docentes hagan buen uso de las tecnologías.
MÉTODO
La
investigación es un estudio observacional descriptivo de corte transversal, ya
que se buscó partir de un
grupo de participantes
(de forma aleatoria),
con el fin
comprender el estado
de los profesores y
su acercamiento con el uso
de la tecnología en la llamada
nueva modalidad de estudio. Este tipo de estudios buscan resultados concretos, como
primer acercamiento, sin
necesidad de mantener
una línea del
tiempo, es decir,
llevar un seguimiento puntual
del caso (Mantero,
et al., 2019);
lo cual se
apega al objetivo de esta investigación.
El
instrumento utilizado fue una encuesta en línea, a través de formularios de
Google, la cual recabó información
sobre 91 docentes
del estado de
Baja California, con
edades comprendidas de los 22 a
los 58 años de edad.
Hay que
recordar que esta
encuesta se aplicó
en enero del
año 2021, con
el fin de analizar
la adquisición de competencias
digitales en los docentes, tomando en cuenta, por ejemplo,
las competencias valoradas
por la Unesco
o bien los
estándares ISTE para
maestros
.Asimismo, los niveles en los
que imparten clases fueron desde
preescolar hasta la
universidad (a nivel de licenciatura) y también se anexaron
casos de clases
a público en
general (cursos, diplomados,
capacitaciones, entre otros). De
los 91 docentes, se obtiene que el 69%
imparte clases en
escuelas privadas, el 21% en escuelas públicas y el 10% imparte
clases particulares. A continuación se presenta el gráfico1, donde
se tomaron en
cuenta los docentes que
impartían en uno
o dos niveles
educativos, en este
sentido se puede
decir que el 15% de
los docentes impartían
en dos niveles al mismo tiempo, mientras que el
resto sólo en un nivel educativo.
Gráfico
1. Niveles educativos en
los que imparten
clase los docentes
encuestados. (Fuente: Elaboración propia a partir de los resultados
obtenidos de la “encuesta para profesores”)
El instrumento
contó con un
total de 21 preguntas, las
cuales se dividen
en tres secciones: datos generales y de contexto; uso
de aplicaciones y
plataformas; y finalmente, preguntas exploratorias
sobre el estado
de ánimo con
respecto a la
segunda parte del
ciclo escolar o bien (en el caso de preparatorias y universidades) al
inicio de un
nuevo ciclo escolar.
En el presente
texto se ahondará
sobre el uso
de aplicaciones y
plataformas. Las respuestas en
la mayoría de
los casos eran
cerradas, sin embargo
hay información cualitativa
que ayudará a
concretar las discusiones y
conclusiones sobre el
uso y manejo
de la tecnología
digital en relación
con el proceso de enseñanza-aprendizaje.
RESULTADOS
Y DISCUSIÓN
A partir
de la encuesta
realizada se obtuvieron los
siguientes datos, los
cuales apuntan hacia las
conclusiones ya propuestas por
diversos autores, nuestras
percepciones y medios
de información que
dialogaban sobre la
situación de los
docentes con el
uso de las
aplicaciones. Cabe destacar que entre
las asignaturas que
imparten se encuentran:
español, matemáticas, física,
geografía, inglés, arte,
pintura, ecología, administración, introducción
a la ingeniería,
informática y literatura.
El gráfico2, responde a
la pregunta “¿Cuáles son
los medios que utilizas para comunicarte con tus
alumnos?”, de los cuales se puede decir que tuvieron la oportunidad de elegir diversos
medios así como agregar algún otro
que utilizaran. Por lo
anterior, se puede reflejar que
algunos profesores utilizan
una plataforma
llamada “Aluzo” y
otra llamada “Amco”, ambas
pertenecen a la
compañía Amco
Educación, S.A.P.I. de C.V (esta compañía se fundó a finales de
los años 90 ‘s en Tijuana, Baja California) la cual se dedica a proporcionar
material didáctico
educativo y capacitación docente; actualmente han
mencionado que son
“profesores Aluzo”. En cuanto
a los más utilizados
se encuentran, en
orden de mayor puntuación: Google
Meet,
correo electrónico, Whatsapp, Google
Classroom,
mensajes de
texto, otras plataformas (Amco), Facebook,
Zoom, Skype y Discord.
Gráfico 2. ¿Cuáles son los
medios que utilizas
para comunicarte con
tus alumnos? (Fuente: Elaboración propia a
partir de los resultados obtenidos de la “encuesta para profesores”)
A partir de
lo anterior, se
puede decir que
los docentes mantienen
sus clases en
línea por medio
de la conversación
grupal, sobre todo
en aplicaciones como
correo electrónico (mensajes
generales), Google Meet, Discord, Zoom,
Skype, y, en
algunos casos, Whatsapp; todos estos pertenecen a los servicios de
videoconferencia. Y, por otro lado, en
casos individuales: correo
electrónico, Whatsapp, y mensajería
por número privado
(celular). Asimismo, para
conocer cuál es
el alcance de
los profesores sobre
cómo llevar una
clase en línea
se les preguntó
qué plataformas educativas
conocían. Se colocaron
algunas opciones pero
otras eran expresadas por
los mismos docentes.
En el gráfico3
se observan los
resultados.
La mayoría
de los docentes
encuestados (89) conocen
Google Classroom, el
cual representa el
97%. En cuanto
al uso de
Blackboard representa el
36% de los
docentes, y el
uso de Edmodo
al 35% de
los docentes encuestados. Asimismo,
se realizó un
seguimiento a esta
pregunta, los resultados apuntaron a que estas plataformas
educativas se utilizan,
sobre todo, el
primero en universidades
y el segundo
en educación secundaria y bachillerato, por lo que se
puede decir que la mayoría de los docentes utilizan Google Classroom para
todos los niveles
educativos, lo cual concuerda con lo planteado por la
SEP como parte
de su estrategia
educativa ante la
pandemia por Covid-19.
Gráfico
3.
¿Cuáles de las siguientes plataformas educativas conoces? (Fuente: Elaboración
propia a partir de los resultados obtenidos de la “encuesta para profesores”)
A
partir de observar qué tipo de plataformas utilizaban y conocían los docentes,
la siguiente pregunta fue “¿Sabes qué son las plataformas LMS?”. Esta pregunta parte
del supuesto que
los profesores pueden utilizar aplicaciones sin conocerlas, en
el caso de
Google Classroom, como
se apuntó anteriormente, es
un LMS, y
como se conoce,
tiene un sistema
de gestión de
evaluaciones y pueden
crear diversas actividades
para que de
forma automatizada se pase
a una hoja
de calificaciones. Así, el gráfico 4,
presenta que el
aproximadamente el 77% de
los encuestados no
conoce qué es
un LMS y
el 23% sí
sabe qué es
un LMS. En este
sentido, podemos decir
que, al momento,
la mayoría de
los docentes desconoce exactamente qué está utilizando y
cuáles serían las
ventajas del uso
de un LMS.
Gráfico
4. ¿Sabes qué
son las plataformas
LMS? (Fuente: Elaboración propia
a partir de
los resultados obtenidos de la
“encuesta para profesores”)
Por otro
lado, partiendo de
la idea de
que los profesores desconocen las
aplicaciones y softwares
y sus funciones,
se les preguntó
si aún siguen
utilizando los libros
físicos para elaborar
las actividades, y
de ser así
cómo están evaluando
estas actividades que
realizan de forma
física. Así, en el gráfico5, se puede observar que
el 78% (71) de los docentes encuestados sí les solicitan actividades que parten
del libro físico, el resto, el 22% (20 docentes), no hacen uso de los libros
físicos. Lo que se entrelaza con las necesidades y recomendaciones expuestas
por la SEP. En cuanto al 22%,
quienes no usan el libro, podría designarse a los docentes que imparten clases
en universidades o
de forma independiente.
Gráfico
5.¿Les solicitas
a tus alumnos
el uso de
libros físicos para
hacer actividades con
tus alumnos? (Fuente: Elaboración
propia a partir de los resultados obtenidos de la “encuesta para profesores”)
Además,
a los
docentes se les
cuestionó cómo califican
o evalúan las
actividades del libro físico, es
decir, cuál es el procedimiento. Los
profesores contestaron de
forma diversa, por
lo que se realizó la
Tabla 1. En
esta tabla sólo
se tomaron en
cuenta diez respuestas, ya
que hubieron valores
parecidos. Y, como
se observa, la
mayoría de profesores
continúan con la
misma forma de
evaluación y seguimiento,
sólo adaptan las
calificaciones en las
plataformas o en su
hoja de
seguimiento. Se puede
concluir que este
seguimiento se realiza
en tres formas:
1.
Subiendo la evidencia
a alguna plataforma LMS; automatizando la
evaluación en la
hoja de cálculo de la plataforma.
2.
Directamente en clase
en línea, preguntando
y revisando a
través de la
cámara; después realiza su
registro en su
hoja de seguimiento.
3.
Subiendo la evidencia
a la nube
(en una carpeta);
después realiza su
registro en su
hoja de seguimiento.
Tabla
1. Sobre
cómo se evalúan las actividades del libro físico; algunas respuestas.
En
cuanto a
los docentes que
sí utilizan libros
digitales, en el
gráfico 6, se
puede decir que el
62% (57 docentes)
hacen uso de materiales digitales
como libros o
documentos PDF. El resto
de los docentes
prefieren el uso del libro o indicar las páginas en las
cuales trabajarán mientras
dan las indicaciones
por Google Meet o
cualquier otro medio
mencionado. Esto, en
realidad, podría deberse
a las formas
de conectividad, es
decir, al acceso
a la Internet
y la estabilidad de
ésta en el
momento de tomar
la clase en
línea; lo cual
se explora más
adelante. En una
pregunta posterior, se
les cuestionó sobre cómo utilizan
estos recursos, la mayoría de
los docentes respondieron que
para las lecturas
en clase, para
aplicar ejercicios o bien para
implementar audios y
videos de estos
libros enriquecidos.
Gráfico
6.
¿Solicitas a tus alumnos trabajar con libros digitales (o PDF ‘s)? (Fuente:
Elaboración propia a partir de los resultados obtenidos de la “encuesta para
profesores”).
Gráfico
7.
¿Cuáles son las páginas o aplicaciones que utilizas para que tu clase sea lo
más exitosa posible? (Fuente: Elaboración propia a partir de los resultados
obtenidos de la “encuesta para profesores”
Por otra parte,
y aunado a
indagar sobre cómo
utilizan estas herramientas
en clase, se
les preguntó “¿Cuáles
son las páginas
o aplicaciones que
utilizas para que
tu clase sea
lo más exitosa
posible?”. Todo se
concentró en el uso de Google, es decir: Meet,
YouTube, Classroom y
parte de la llamada Gsuite: documentos,
presentaciones, hojas de cálculo
y encuestas. Sólo
el 15% de
los docentes hacen
uso de algunas
otras herramientas (aplicaciones) que
están disponibles en la
Internet.
Finalmente, en el gráfico
8 se muestran los
resultados de la
pregunta “¿Cuáles son
los problemas a los que te has enfrentado en clase?”. El 68% (62
docentes) afirmaron que el mayor problema es la calidad de la Internet, el
segundo conflicto es que sienten que logran ver y conectar emocionalmente con
los alumnos, haciendo las clases
complejas, pues
el seguimiento no es el óptimo,
esto corresponde al 51% (47
docentes). El 42%
(38 docentes) afirma que otro de los problemas es la mala
conectividad por el uso de alguna aplicación.
Por otra
lado, el 30%
(28 docentes) opina
que no logran
ejemplificar correctamente lo que
quieren decir y se dan
diversos malos entendidos
y por ende
resultados. El último
punto importante en
esta estado trabajando con lo que tienen al alcance, no se
niegan a capacitarse
pero para ello
se tienen que tomar en cuenta su
horario laboral. pregunta
fue que hay
alumnos ausentes, es
decir, que ni siquiera se llegan a conectar a la sesión, lo cual hace
más difícil el seguimiento o
localización de los
alumnos. Y, aunque
no se incluye
el gráfico, se
puede decir que el
100% de los docentes desconocen las formas de
seguridad y privacidad
de sus dispositivos
y sobre todo,
de los términos
y condiciones de
Google Suite y
Google Classroom.
Gráfico
8.
¿Cuáles son los problemas a los que te has enfrentado en clase? (Fuente:
Elaboración propia a partir de los resultados obtenidos de la “encuesta para
profesores”)
CONCLUSIONES
Algunas consideraciones que
deben tenerse en mente para
estas conclusiones, es que
la mayoría de
los docentes encuestados
imparten clase en escuelas privadas, también se puede
decir que la
mayoría de ellos
imparten clases en nivel básico y son quienes presentan mayor
nivel de complejidad en
el uso de
dispositivos y aplicaciones.
A partir
de lo expuesto
en el marco
teórico se puede concluir que los docentes han En consecuencia,
encontramos docentes que
están innovando e
incluso tienen conocimiento sobre
el significado de
las plataformas LMS; en
este sentido, estos
docentes son los que probablemente auxilien a otros.
También es cierto
que aunque la
SEP dio materiales
para trabajar con
los alumnos, los
docentes no lo
mencionan.
Asimismo, se
puede percibir que
los docentes hacen lo posible
para integrar a los alumnos, sin embargo hay casos en los que los docentes no
logran localizarlos, lo que hace
imposible el avance
con estos alumnos.
Hay que recordar
que los docentes
comprenden diversos medios de
comunicación: mensajería instantánea,
por Facebook, Whatsapp, correo
electrónico, entre otros.
En este entendido, podemos decir
que cumplen con
esa flexibilidad nombrada
por García (2021).
Finalmente,
y, efectivamente, los docentes cumplen con
este momento de
contingencia, pues sus
estrategias, actividades y
técnicas no se
han visto en una grave
modificación, solamente
han agregado el
sistema de adjuntar fotografías, ya sea a: la nube
(drive), a la plataforma
educativa, de forma
física o directamente
en la clase
en línea con
un proceso rápido
de revisión. Lo
que debe detonar un
mejor planeamiento de
cara al futuro
si queremos que
esto no se
repita.
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